Una maravillosa tarde.

Abril de 1972.

Era otra tarde, una simple tarde, no había nada interesante que hacer, podía escuchar como el hombre de ya avanzada edad, que se ubicaba enfrente de mí, tamborileaba sus dedos contra su escritorio y se pasaba las manos por el poco cabello que le quedaba. Estaba en una entrevista de trabajo, era recién egresada de la Universidad de Nueva York con un titulo en Literatura ¿Pero iba a pedir un trabajo relacionado con mi área profesional? ¡No! Iba a pedir trabajo para ser la secretaria de no se quien, quien era jefe de no se donde, simplemente necesitaba trabajo y no tenia opción. Podía ver como el hombre regordete leía lentamente todo mi currículum.

-Vaya, Es usted egresada-dijo finalmente.-

-Así es-dije tratando de sonreír, tenía un jodido titulo pero terminaría trabajando para otro egocéntrico empresario y como su secretaria-

-suspiro y se paro de su asiento-Gracias por venir, Señorita Miller, nosotros la llamaremos-dijo dándome la mano ¡MIERDA! otro trabajo que no consigo, mañana tendría que comprar el maldito periódico, otra vez…-

-Hasta luego-dije marchándome y tomando mi bolsa, ni siquiera me moleste en tomarle la mano-

Salí de aquel lugar, decepcionada y furiosa, ¿A quien le darían el puesto? ¡Ya se! A una rubia de grandes senos con la mentalidad de un puto unicornio, y yo que tengo un título, no soy lo suficientemente buena como para trabajar con otro empresario más.

Trate de tranquilizarme en cuanto Salí del edificio y decidí caminar…nadie me esperaba en casa, mi gato solamente…creo que puede arreglárselas solo.  Vi mi reloj de pulsera, las cinco de la tarde…tenía tiempo de sobra, podía ir a sentarme y hacer algo, tan siquiera ver como la gente inhalaba y exhalaba, pero algo. 

Estaba muy cerca del famoso Central Park.

Camine solo unas cuadras y me encontré enfrente del famoso parque, fui y encontré una banca vacía y me senté, era un parque amplio y mucha gente se pasaba por el, desde ancianos tomados de la mano, hasta jóvenes, igualmente, tomados de las manos. Era un hermoso retrato de un día pacifico, era Primavera así que los arboles tenían las hojas mas verdes que nunca y las flores estaban sencillamente hermosas, abriendo sus capullos y dejando salir su delicioso aroma.

-¿Te molesta si me siento?-escuche que alguien dijo, la verdad que si, compañero, me molesta mucho si te sientas conmigo, alcé la mirada y pude ver que era un hombre que tenía una cara extrañamente familiar, tenia una expresión seria pero dócil-

-No, supongo, hay mucho espacio-dije encogiéndome de hombros y entonces el extraño me dio una sonrisa que parecía que se estaba burlando de mí, o quizá así era su sonrisa, quien sabe. Se sentó a mi lado y parecía estar viendo a la nada…-

-Bonita tarde ¿No?-dije tratando de romper la tensión…mi madre me había dicho que no hablara con tipos extraños que utilizaran gafas redondas y tuvieran sonrisas extrañas-

-Así son todas las tardes-dijo sin dejar de ver a un árbol, o al horizonte, yo que sé.- Tu no vives por aquí-dijo en tono de afirmación-

-¿Puedes ver el futuro? ¿Cuál será el numero ganador de la lotería de esta noche, maestro?-dije en tono sarcástico, realmente aquel tipo extraño me irritaba, y ni siquiera sabía por qué, solo río y estaba listo para contestarme cuando…-

-¡Eres John Lennon!-dijo una voz chillona que provenía de una chico de no mas de 14 años- ¡No lo puedo creer, eres John Lennon!

-Depende ¿Eres del departamento de Inmigración?-dijo alzando una ceja-

-¡Necesito un autógrafo tuyo!-dijo el chico sin dejar su expresión de jubilo y sorpresa, el tipo extraño se paro y le firmo su camiseta ¿De donde consiguió esa pluma?, quizá siempre cargaba una consigo, el chico parecía que iba a reventar de tanta felicidad y le dio un efusivo apretón de manos-¿Cuándo te vas a reunir con los chicos?

-Mañana-dijo el extraño sonriendo y alejándose de él y acercándose hacía su lugar en la banca que compartíamos, así que John Lennon ¿eh? El melenudo mayor, líder de aquellos Beatles, ah, se habían separado hacía unos años…mi hermana menor lloro como nunca.-

-Sabia que las gafas de científico loco se me hacían conocidas-dije en un susurro-

-río-¿Crees que son de científico loco?

-Son horribles-dije

-Gracias-dijo sonriendo-

-¿En donde esta la japonesa?-pregunte alzando una ceja, la mayoría de la gente, al tener enfrente a John Lennon temblaría y le pediría un autógrafo, pero yo no era fan ni de él ni de The Beatles, para mí era solo un ser humano mas, que vivía y respiraba en la tierra y que casualmente estaba entablando una conversación conmigo-

-¿Te refieres a mi esposa?-pregunto

-¿CUANDO SE CASARON?-pregunte exaltada-

-río-¿Fan de Paul?-pregunto

-Fan de los Stones-dije dándole una mirada retadora-

-Que coincidencia, yo también lo soy-dijo sonriendo-

-No sabía que tu y la japonesa se habían casado-dije, mi hermana odiaba a Yoko Ono y por eso me dijo que debía nombrarla como “la japonesa” aunque yo estaba segura que era china, pero ella insistía en que era Japonesa-

-río-Te doy la noticia, estoy casado-dijo

-¿Y como te va aquí, no extrañas Londres?-pregunte, la verdad, esperaba que se fuera o algo así…gente famosa como el no hablaba con sus fans, estaban demasiado ocupados para ello, pero yo no era su fan…así que quizá, eso no aplicaba conmigo-

-Me gusta mucho aquí-dijo

-A mí también-dije sonriéndole-

-¿Cuántos años tienes?-pregunto mientras sacaba un cigarrillo de su bolsillo y lo encendía-

-veintidós-dije

-Eres una jovencilla aún-dijo dándole una calada a su cigarrillo-

-Supongo-dije

-¿A que te dedicas?-pregunto-

-A nada, soy recién egresada de la Universidad, y justo vengo de una entrevista de trabajo fallida, la quinta esta semana-dije pasándome las manos por el cabello- y tu ¿a que te dedicas?

-río- En las noches me disfrazo y combato el crimen, y de día son una estrella de Rock-

-Tan siquiera tienes algo de diversión-dije sonriendo-

-¿Cómo te llamas?

-Mis amigos me llaman Caroline, pero tu puedes llamarme Janet-dije-

-¿Tus papas saben que te has metido porros?-pregunto sin dejar de fumar-

-reí-Créeme que no necesito ninguna droga para hablar tan elocuentemente-

-Por cierto ¿Qué estudiaste en la Universidad?

-Literatura-dije viendo hacia el horizonte, faltarían pocos minutos para que dieran las seis de la tarde-

-Vaya-fue todo lo que dijo-

-¿Por qué si eres tan famoso, sales a caminar por aquí, sin protección y esas cosas? Cuando eras un Beatle, no salías sin protección ¿Oh si?-

-sonrío-Con que fan de los Stones ¿No?-

-Mi hermana menor esta traumada contigo y tus otros amigos melenudos, especialmente con el bonito de Paul McCartney-dije- Marica encubierto.

-soltó una carcajada-Al fin, alguien que también piensa que Paul es un marica, y camino por aquí, porque me gusta mucho el paisaje, además hay gente que incluso conozco y mi casa esta muy cerca-dijo mirando hacía un costado, es cierto, Vivía en el edificio Dakota-

-¿No deberías de tener barba y esas cosas y ser espeluznante porque eres un hippie?-pregunte-

-río-Me corte la barba, pero creo que aún sigo siendo, hasta cierto punto, espeluznante-

-¿Pero si eres un hippie, no? Tú escribiste esa canción, la que habla de la paz…-dije

-Imagine-dijo

-¿Qué quieres que imagine?-pregunte

-Un mundo mejor-dijo

-Eres muy extraño ¿Sabes?-dije

-Y tú, sin duda, eres una de las personas más peculiares que he conocido.-

-¿Debería de sentirme orgullosa?-dije

-He conocido a mucha gente…muchísima, todos iguales-dijo

-¿Puedo hacerte una pregunta?

-La acabas de hacer-dijo-

-¿Tú eres feliz?-pregunte y por primera vez, me miro directamente a los ojos, e incluso, juraría que se bajo un poco las gafas para verme…-

-Define “feliz”-pregunto-

-Es decir –me sonroje, ni siquiera sabía porque estaba teniendo esta conversación y porque estaba haciendo estas preguntas- ¿Te sientes bien contigo mismo? No sé, dicen que cuando uno es feliz, se siente completo ¿Tu te sientes completo?

-pareció pensar un poco- Me siento bien, creo que podría sentirme mejor, y me siento mas completo que cuando era adolescente, pero creo que aun me falta un poco más por recorrer, quizá dentro de unos ocho años te pueda dar una respuesta concreta.-

-Oh, claro-dije

-río- ¿Tú te sientes completa?

-De vez en cuando-dije-Quizá lo que no me hace sentirme totalmente completa, soy yo misma. La batalla más grande se libra en contra de uno mismo…-

-Es muy cierto-dijo parándose de su lugar-Nos vemos pronto, Caroline, perdón, Janet –dijo guiñándome un ojo-

-Hasta luego-dije dándole una sonrisa y viendo como se marchaba…-

-Oh, espera-dijo volviendo y sacando algo de su bolsillo-Supongo que como estudiaste Literatura, escribes 

¿No?-asentí- Toma, entonces –dijo dándome su bolígrafo-

-No puedo aceptarla-dije

-No seas tonta, tómala-dijo con gesto amable, me resistí y tomo mi mano, y puso el bolígrafo en ella- Algún día te servirá, ya verás.

-Si tú lo dices-dije

-Si lo digo, nos vemos, Caroline-dijo marchándose de nuevo, pero se volteo y quedo viéndome-Por cierto, yo creo que todo va a estar bien ¿Sabes? Vas a ganar la batalla, solo tienes que resistir-dijo sonriéndome de nuevo y despidiéndose de nuevo con un ademán-<

-Adiós, John-dije para mí misma y observando el bolígrafo que me había dado. No todos los días John Lennon te obsequiaba un bolígrafo…solo sonreí para mi misma y me dispuse a regresar a  mi departamento, después de una muy buena tarde.  

Una maravillosa tarde. 

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Me inspiré con Hold On, me encanta esa canción y no me la puedo quitar de la cabeza, a mi me hubiera encantado el haberme topado con John de esa manera :')

PD: Yo daría mi mano por tener un bolígrafo que Lennon haya tan siquiera tocado...